El poder del tiempo

River empató en el Monumental sin goles y dejó al descubierto que todavía falta mucho por evolucionar. En un partido muy intenso desde lo físico, no pudo superar a un rival que vino a competir sin más argumentos que la fricción. Pero lo cierto es que River tuvo la pelota pero careció de ideas para penetrar la defensa del rival. Malas decisiones y poca imaginación para ir a buscar fueron las constantes de la noche. La realidad es que River sigue sin poder ganar de local, paradójicamente algo que tenía resuelto en el ciclo anterior

Luego de conseguir la victoria de la urgencia, River tenía que seguir su construcción jugando por la liga. Era lógico que el equipo mermara el rendimiento despues de un triunfo rutilante, pero estábamos confiados que el efecto Gallardo nos iba a dar ese envión para ganar y seguir trabajando. Los equipos se construyen a base de victorias. Tomar confianza y generar mentalidad ganadora son claves para los comienzos de ciclos. Jugadores nuevos y algunos que volvieron a ser titulares confluyen en  un equipo que tiene que volver a nacer. Si bien el DT conocía a la mayoría y los que llegaron tienen sobrada capacidad para adaptarse hay que armar un equipo, de eso se trata este juego.

Gallardo salió a pedir a gritos tiempo. Todavía no ha pasado un mes desde que llegó el cuerpo técnico nuevo. Fue tanto el revuelo y la falta de empatía que teniamos con Demichelis que nos parece que el muñeco nunca se fue. Lo extrañamos tanto que bajamos el nivel de exigencia, este partido con el DT anterior hubiese desatado un escándalo de criticas. Sereno y tranquilo Gallardo hizo hincapié en el aspecto físico y en la fricción como característica principal. El fútbol argentino, que cuenta con 10 equipos del Nacional B, se transformó en un lucha de poderes. Todos tienen claro cual es su poder y lo quieren hacer valer frente al rival de turno. En este caso, si Newell's nos salía a jugar, su técnico se quedaba sin trabajo. Entonces optó por desarrollar la destreza del anti fútbol, tan válida como la nuestra. Otro camino no tenía. Estará en nosotros darnos cuenta de como tenemos que jugar este tipo de partidos. Todos van a venir a buscar la épica al Monumental y más con el muñeco en el banco.

Formar sociedades es el camino para que poco a poco podamos conectar dentro de la cancha. Un equipo largo, extraño en los equipos de Gallardo, fue la muestra de que falta trabajo. Todavía estamos buscando la mejor posición para Meza, todavía estamos recuperando a Kranevitter, todavía estamos generando el contexto para que Mastantuono y Echeverri jueguen a lo que saben, todavía el medio no arranca. Ese motor fundamental para el volumen de juego de River todavía no funciona. No podemos generar presión  conjunto, distribución rápida, ni  generar espacios, que en definitiva es lo que busca el DT.

Los equipos se arman de atrás para adelante. El salto de calidad en defensa nos dejó tranquilos que solo falta rodaje y que ya se van a acoplar bien. El debut de Acuña nos dejó buenas sensaciones pero le falta en lo físico. Pezzela es cada vez más caudillo. En cuanto le de orden al chileno Diaz vamos a coordinar mejor. Por el lado de Bustos la esperanza está, es un cuadro al estilo de River. Falta ganar confianza y eso llevará a ganar terreno. Una defensa en la mitad de la cancha para acortar el equipo.

Nos da la sensación de que nos sigue faltando el compañero ideal para Borja. No encontramos el segundo delantero que nos de ese punch que necesitamos para sacarle más jugo al colombiano. No es que esté solo arriba, tenemos volantes que pisan constantemente el área pero la vocación del atacante natural te da otra profundidad. Tener el arco entre ceja y ceja es cualidad de ellos, sean por adentro o por afuera. La obsesión por el gol y el remate constante, eso necesitamos más allá de Borja.

El balance de este mini sprint de partidos es positivo. Hay signos de vitalidad. Muestras de que llegó el muñeco. Hay que evolucionar desde lo físico y futbolístico. Hacerse cargo de que hay que trabajar, de que el tren estaba andando y este cuerpo técnico eligió subirse. Confiar en el poder del tiempo para que ese tren llegue a buen destino.

DANIEL MODAI
Imagen: Fer Arenas